“Pero nosotros no somos de los que retroceden para perdición, sino de los que tienen fe para preservación del alma” Hebreos 10: 39
En mi meditación bíblica de hoy, estaba pensando en cada uno de mis hermanos y amigos, a quienes aprecio y valoro en gran manera, el Señor me reveló situaciones que algunos están pasando en este tiempo, y esa es la razón por la cual me dispongo a escribir estas líneas para ustedes.
Las Escrituras revelan que, en la medida que avanzare el tiempo, en el mundo se aumentaría la aflicción, ya que la maldad y su herramienta, la mentira, está por todos lados, engañando a los hombres a naufragar en sus matrimonios (el adulterio oculto carcome sus cimientos, aunque por fuera se mantenga la fachada del edificio), corrompiendo la concordia familiar (los gritos, los celos, los malos tratos, las deudas, el abandono, el fracaso, la soledad, la falta de comprensión, la falta de comunicación, la falta de afecto, etc.), enfriando el amor, endureciendo los corazones con indiferencia, desinterés por las cosas santas, apatía por la necesidad del prójimo, todo ello en un contexto de amor a sí mismos, a los deleites, al dinero, a la reputación, los placeres que vician el alma y la vuelven infructuosa.
La Palabra de Dios nos enseña que la vida cristiana se trata de rendirse a Dios y no ante los problemas, porque cuando te rindes antes los problemas estas demostrando que el problema es más fuerte que Dios, pero cuando te apoyas en el Señor en medio de tus problemas es cuando estas demostrando que a pesar de sentirte débil sabes que en Dios obtendrás nuevas fuerzas.
Con esto no quiero decir que exaltemos al problema, exaltemos a DIOS que es el único que puede sacarnos de situaciones que para nuestra mente son difíciles de salir. Cuando crees que eres débil, entonces eres más fuerte, porque Dios manifiesta su Grandeza en tus debilidades. Como Poderoso Gigante está contigo!
Por otra parte la Biblia dice que no he visto justo desamparado ni su descendencia que mendigue pan. No hay justo que deposite su confianza en el Señor y salga defraudado. También tienes que comprender que muchas veces lo que tú quieres no es lo que Dios quiere para ti, entonces frente a esto: ¿Qué pasaría si tu petición es un NO?, ¿Acaso por eso saldrás huyendo al mundo?, ¿Acaso eso será razón para dejar a Dios?
En los momentos de soledad, angustia, problemas, donde el alma se agita, encontramos un refugio, su Gloriosa Presencia nos abraza, nos consuela, nos da una nueva esperanza y nos cubre con su manto divino, toma control de nuestra situación y cambia el horizonte de nuestros pensamientos, nos hace libres, aflojamos las alas, podemos volar en libertad y sentirnos respaldados, seguros y pastoreados por nuestro buen Pastor.
El salmo 62.5 dice: «Alma mía, sólo en Dios reposa, porque Él es mi esperanza. Sólo Él es mi roca y mi salvación, mi refugio...» Y también dice: «Sólo en Dios se aquieta mi alma, porque de Él viene mi esperanza» (Sal 62. 1). Si hay alguien en quien puedo descansar y dormir tranquilo, es Dios (Sal 4.8).
Amado, Dios me hace sentir en mi corazón que te diga que NO TE RINDAS, el enemigo quiere verte derrotado, más Dios te llamó para SER MAS QUE VENCEDOR EN CRISTO.
Toma fuerzas de donde no las hay, saca fe de donde no hay más, levántate, sacúde el polvo e inténtalo nuevamente, NO TE RINDAS, por favor, NO TE RINDAS.
De mi parte cuenta con el respaldo espiritual y apoyo moral. Tu causa es mi causa, tu problema es mi problema, tus victorias son mis victorias.
Recientemente coloqué un mensaje en mi Facebook que decía: Un conocido puede mostrarte el camino, un amigo puede recorrerlo contigo, y ese amigo soy yo, CUENTAS CONMIGO.
JUVENAL CASTILLO.
